Envejecimiento de la piel.
El suministro de nutrientes a
la capa externa de la piel, comienza a declinar a partir de
los 25 años.
Los fibroblastos son las células encargadas de producir
colágeno, el principal sostén del tejido conectivo de la
piel.
A medida que la gente envejece, los fibroblastos producen
cada vez menos colágeno.
La piel va perdiendo tirantez, humedad y elasticidad,
produciéndose las conocidas arrugas.
Cabinas de colágeno.
Las últimas investigaciones
han permitido verificar que la aplicación sistemática de luz
roja en el rango de los 633 nanómetros, estimula y aumenta
la formación de colágeno en forma notable.
Esta aplicación se realiza en “cabinas
de colágeno”, que son similares a las de
bronceado con la diferencia de tener tubos especiales que
emiten luz roja.
El tratamiento en sesiones de 10 a 20 minutos, también
aumenta la elastina y el ácido hialurónico.
Las pequeñas arrugas se reducen, la piel se vuelve más
tersa, suave e hidratada.
El tratamiento en cabinas de colágeno también aumenta
la absorción de cremas cosméticas, haciéndolas mas eficaces.
Además de la mejora del aspecto de la piel, el aumento del
colágeno tiene un impacto positivo en la flexibilidad de los
tendones, ligamentos, articulaciones y regeneración de los
músculos.
Resultado a corto plazo del
tratamiento en cabinas de colágeno.
- Piel más suave y
flexible.
- Aumenta la hidratación.
- Afina los poros y mejora
la textura de la piel.
- Aumenta la resistencia.
- Relaja y brinda
sensación de bienestar.
Resultado a largo plazo del
tratamiento en cabinas de colágeno.
- Reduce las pequeñas
arrugas.
- Disminuye las manchas de
la vejez.
- Reduce hinchazón
alrededor de los ojos.
- Repone el colágeno y
elastina en el tejido conectivo, logrando una piel tersa
en todo el cuerpo.
- Aumenta el crecimiento
del cabello, uñas, huesos y tendones.
- Mejora la capacidad de
regeneración muscular.
El tratamiento es totalmente
inocuo, y se puede aplicar a personas de cualquier sexo y
edad.
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